La expansión por razones correctas

La UEFA puede enorgullecerse del éxito que han tenido tanto sus competiciones de selecciones como sus competiciones de clubes durante casi 60 años. Este éxito se debe, en gran parte, a su estrecha vigilancia sobre sus competiciones y a hacer los ajustes necesarios en el momento adecuado.

El ejemplo más reciente concierne al Campeonato de Europa Sub-21 de la UEFA después de que se ampliara el número de participantes, de ocho a doce, en la fase final, una decisión que se concretó en el Comité Ejecutivo de la UEFA durante su reunión en el mes de enero. El mismo proceso de ampliación se ha aplicado en el Campeonato de Europa de la UEFA (para la UEFA EURO 2016), en el Campeonato de Europa Femenino de la UEFA (para el Campeonato de Europa Femenino de la UEFA de 2017) y en algunas competiciones juveniles.

Cualquier decisión de ampliar la fase final de un torneo tiene que ser siempre por motivos deportivos. Nadie diría que este no es el factor principal cuando se expanden los campeonatos juveniles, que requieren una gran inversión financiera por parte de la UEFA con el fin de dar a los jugadores jóvenes la oportunidad de experimentar una fase final de una competición UEFA, una experiencia realmente valiosa para su desarrollo. 

Hubo algo más de escepticismo cuando se expusieron las razones para ampliar la fase final del Campeonato de Europa de la UEFA. Sin embargo, la fuerza de nuestras selecciones nacionales, que regularmente brillan en la Copa Mundial de la FIFA, no debe ser pasada por alto. Como tampoco debe ser pasada por alto la aparición de nuevas selecciones pujantes como Bosnia y Herzegovina y la Antigua República Yugoslava de Macedonia, que están deseando dar la sorpresa y romper el orden establecido. No se pueden hacer de menos tampoco los esfuerzos de las federaciones nacionales por mejorar sus instalaciones y sus cuerpos técnicos, lo que ha mejorado la calidad de su fútbol para seguir elevando su nivel a todos los niveles, un progreso que la UEFA apoya firmemente a través del programa HatTrick y de iniciativas como la Convención de Entrenadores de la UEFA y del Plan de Grupo de Estudio.

Por todas estas razones y por muchas más, estoy seguro de que la UEFA EURO 2016, que ya ha echado a andar tras el sorteo de la clasificación en Niza, será una gran demostración de la vitalidad y calidad de nuestras selecciones nacionales.